Un molesto individuo que tremendo ser amigo mío, está atrapado entre dos ríos. Ambos tienen sus cosas malas (cualquier idiota sabe los ríos solo portan heces y bichos infestos), pero él sólo puede nadar en uno de ellos. Dispone del neopreno (están maricón que no puede nadar como un hombre, a pecho descubierto), tiene el equipo necesario (otra peponads), pero sus dudas le frenan. Va a pasar tanto tiempo planteándose en qué río nadar que cuando venga la previsible crecida y las aguas lo inunden todo, morirá ahogado (, loado sea Dios por tan acertado designio) de forma harto desagradable y preguntándose qué hizo mal esta vez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario